ETERNO DÉJÁ VU

ETERNO DÉJÁ VU

Indudablemente el gobierno tiene un encono especial con el campo. Nunca entendió la actividad,ni pretende  hacerlo y cada vez que puede lo apalea. Es un eterno déjà vu .

Sin embargo los actores del campo no solo no dudan en levantar su voz de protesta y ejercer medidas que hace 30 años hubieran sido impensadas de parte de ese sector de la economía nacional, sino que además, en los últimos tiempos,  una parte de la población que vive en importantes centros urbanos comenzó  a tomar en cuenta la importancia que la actividad agro-industrial tiene para el país a la hora de generar empleo y sumar divisas a las arcas del Estado, por solo mencionar dos aspectos.

A  pesar que necesita imperiosamente los dólares que el campo produce, el gobierno no se cansa de vapulearlo. En lugar de atraerlo, convencerlo con alguna medida sensata,  lo agarra a patadas cada vez que puede. Lo acusa de especulador cuando el campo liquidó divisas como nunca en la historia,  otra mentira más del  glosario oficial.para intentar tapar que las cuentas no cierran por ningún lado.

Una vez más quieren arrear a los productores a la fuerza a un corral donde estos no van a ingresar mansamente más allá de los gritos sobreactuados del presidente Alberto Fernández asegurando  que no le van “ a doblar el brazo”, cuando todos saben que ese brazo ya está fracturado.  

Para la lógica política oficial siempre hace falta un enemigo contra quien emprender una batalla que ayude a crear un relato épico que permita mostrar fuerza y victimizarse a la misma vez. Puede ser Clarín, La Nación,  la Corte o el nunca bien ponderado campo.  Qué mejor que un grupo de “oligarcas terratenientes que especulan con los granos que el pueblo necesita para comer”.  Idea tan vieja como la rueda que solo cala en mentes afiebradas de quienes profesan una fe político- religiosa sin cuestionamiento alguno,  a los que se suman aquellos que lo hacen por conveniencia personal, claro está.

El gobierno habla de especulación y prácticas desleales, pero no son pocos los que se preguntan  qué hay más especulador que un Estado que a la fuerza paga 100 lo que vale 500 y se queda con la diferencia sin más?

Qué pensaría cada uno de los ilustres integrantes de la dirigencia política gubernamental, si se los tratara de “vende patria especuladores” por no querer entregar sus ahorros? . Qué dirían si de sus abultados sueldos o pornográficas pensiones se descontará  más del 50 por ciento a modo de retenciones  e impuestos varios y luego, lo que les quedara, se lo pagasen a valores irrisorios? Fácil es reclamar lo ajeno.

Una muestra de lo arriba afirmado la dio el diputado Máximo Kirchner cuando hace ya un tiempo un periodista militante le preguntó casi pidiendo perdón por la osadía, si no le hacía ruido su fortuna ($400 millones declarados hace más de un año) y la primer respuesta que salió de la boca del legislador fue:  “no entiendo la pregunta”.  Sucede que para muchos políticos de nivel nacional: "Lo tuyo es mío y lo mío......es mío".

D.R