El Mago, los Gordos y la Farolera

El Mago, los Gordos y la Farolera
La CGT convocó a un marcha para el 17 de Agosto

Los Gordos de la CGT preparando las zapatillas para marchar  -no contra las políticas de un gobierno como lo han hecho siempre-, sino para pedir la unidad del FdT,  los movimientos sociales de izquierda y los afines al kirchnerismo,  reclamando juntos un bono de $ 20 mil , el “minúsculo” mercado del dólar blue  imparable, la porta voz Gabriela  Cerrutti mostrando su peor lado neoyorkino con “tolerancia cero” a preguntas que a su entender no corresponden hacer ,  la inflación desbocada, y la falta de apoyo explicito a las medidas económicas recientemente lanzadas, fueron solo algunos de los males que los integrantes del FdT tuvieron que surfear juntos esta semana  a pesar de las intenciones  de la vicepresidenta  Cristina Fernández y del titular  de la Cámara de Diputados, Sergio Massa,  de despegarse del problema, dejando al presidente Alberto “Magic” Fernández a merced de su frágil memoria y su incontenible verborragia.

Mientras tanto la ministra de Economía Silvina Batakis - a quien muchos ya apodaron  “la Farolera” (como la canción infantil,  porque  “… todas las cuentas le salieron mal),  observó azorada como cada una de sus pocas intervenciones solo sirvieron para aumentar la presión de una olla que en cualquier momento comienza a tocar pito, último aviso antes de explotar.

Tan raro es el clima en el FdT que, mientras que Batakis y la porta voz presidencial , anunciaban que no hay fondos para el tan ansiado Salario Universal que llegaría a 7 millones de personas representando el 2% del PBI,  la vicepresidente decidió  ordenar  a los integrantes de ambas cámaras del Congreso que responden a su mandato, que apuren el proyecto para que el tema salga por ley lo más rápido posible para poder así avanzar en dos frentes a la vez : 1) calmar la calle sacándole poder a las organizaciones sociales, 2) entregar el control de dichos planes  a los intendentes y gobernadores que no dicen nada pero sonríen con placer de solo pensar en la posibilidad de sumar  algún que otro voto cautivo que a su entender, “nunca vienen mal”.

Un renglón aparte merecen los integrantes de la conducción de la CGT que luego de varios meses de silencio sepulcral no tuvieron más remedio  que ensayar una suerte de reclamo para dentro de treinta días, más precisamente 17 de agosto,  habida cuenta de la presión que ejercen algunos sindicatos de base que ven como el salario de sus afiliados se licua a diario en un país en el que ya se pronostica una inflación cercana al 80 por ciento. 

Llama la atención que el reclamo de “los Gordos”, -denominación esta acuñada por el extinto periodista Julio Ramos, quien los bautizó así no por una cuestión de peso corporal, sino por el que ejercían en las decisiones de la vida política del país-  fuera prevista con tanto tiempo de antelación.  Algunos afirman que esto se debe a las negociaciones que llevan adelante para que el gobierno cumpla la promesa realizada el 1º de julio pasado vinculada con un plan oficial que permitiría a las obras sociales sindicales ahorrar unos $ 35 mil millones.

Como si esto fuera poco, el ministro de Seguridad , Aníbal Fernández,  no tuvo ningún empacho en afirmar, que en estos 30 meses de gobierno, el presidente Alberto Fernández, no solo hizo “cosas mágicas por el país”, sino que merece la reelección. Es verdad aunque Ud. no lo crea.

En los pasillos de la Casa Rosada  se preguntaban si semejante afirmación ministerial fue una palmada de aliento o un salvavidas de plomo, porque a partir de allí los memes, chanzas y burlas respecto a las cualidades de mago de Alberto Fernández, no tuvieron límite, como así tampoco  las carcajadas que aún hacen retumbar  las paredes  del Instituto Patria y la oficina de CFK en el senado.

Por último y para terminar de cerrar una semana para el olvido, el presidente no tuvo mejor idea que  volver a culpar a la pandemia, la guerra y “a los de adentro que especulan y generan incertidumbre”, para explicar el desbarajuste económico en el cual se encuentra el país que gobierna hace ya dos años y medio, sin tener en cuenta que hasta ahora no pudo sacar un conejo feliz  de la galera que le permita continuar el show con cierto decoro.

Por: D.R