"Que Dios los guarde"
La designación de uno de los políticos con imagen negativa más alta del país como una suerte de salvador del gobierno del Frente de Todos, no hace más que dejar en evidencia el estado de deterioro en que se encuentra dicha coalición.
Haber nombrado a Alberto Fernández es un error, que Cristina Fernández se reprocha a diario. No hay ningún punto de coincidencia entre la vicepresidente y su compañero de fórmula a quien en un acto inédito en la historia nacional se designó porque sí nomás, con un solo objetivo, que el presidente no cumplió.
Ahora, en una suerte de profecía autocumplida, le tocó el turno a Sergio Massa. Fue Cristina Fernández quien años atrás enojada por las declaraciones de Magarita Stolbizer le indicó al todo terreno Oscar Parrilli que el culpable de dicho embate era Massa por lo que había “embocar a ese hijo de puta”. Todo llega.
Así las cosas, el principal referente del Frente Renovador quien se cansó de fustigar a la actual vicepresidenta y a su guardia de hierro a quienes no solo trató de ñoquis sino que aseguró iba a meter presos, hoy es el número dos de la coalición de gobierno, teniendo en cuenta que el presidente Alberto Fernández ya no tiene voz ni voto cuando se reúne el consorcio.
Nadie pudo explicar hasta el momento qué pasó para que las condiciones que Massa imponía para sumarse al gabinete fueran inaceptables hace 27 días y ahora no. Las dejó de lado? Difícil de creer.
Nadie pudo explicar tampoco para qué se nombró a Silvina Batakis, -quien al parecer con tal de conservar un conchabo estatal cualquier lugar le viene bien-; lo mismo ocurre con Daniel Scioli, quien ni lerdo ni perezoso agarró otra vez la zunga y enfiló para la embajada de Brasil, lugar donde muchos afirman ni cuenta se dieron que ya no estaba.
Cómo será de grave la situación interna de la alianza gobernante que al dejar su cargo en el gobierno Gustavo Beliz les encomendó ayuda divina. Sin aclarar si la frase “que Dios los guarde”, fue por el estado del país o por la llegada de Massa al gabinete.
Alta tensión
Quienes transitan los pasillos del Instituto Patria, afirman que “Sergio es otro fusible como fue "La Griega". Ojalá éste aguante la tensión y nos de algo de aire para llegar a fin del mandato y si no es así.... saltará como todo fusible ”.
Las mismas fuentes aseguran que en realidad “el poder que tiene al que ahora la prensa llama superministro no es tal. Las cajas que valen la pena las seguimos manejando nosotros y eso no va a cambiar”. Un ejemplo de esto es la designación o permanencia en espacios de poder real de funcionarios kirchneristas de distinto linaje.
Las preguntas que caben hacerse ahora es cómo hará Massa para conciliar los intereses del círculo rojo que lo impulsó con los de las organizaciones sociales cercanas al gobierno.?
Cómo hará el nuevo ministro de Economía, para convencer al campo de abrir los silobolsas que tanto enfadan al presidente Fernández y a su vez no hacer enojar a Juan Grabois, una suerte de portavoz de CFK que ya salió a marcarle la cancha?
Cómo confiar en un dirigente que cambia de lugar y parecer con inusitada rapidez sin ponerse colorado.
Cabe recordar que Massa fue: titular de la ANSeS en 2002(Duhalde) , intendente de Tigre en 2007 (PJ) , jefe de gabinete en 2008 (gobierno K) . Otra vez intendente en 2011 , diputado en 2013 en este caso por el Frente Renovador. Candidato presidencial en 2015 -donde prometió cárcel para todos y todas- . y sin embargo en 2019 con tal de acceder a un lugar que satisfaga su ego, no dudó en saltar el cerco moral que él mismo había construido y pasar a las filas del FdT, ese grupo Nac&Pop a quien años atrás aseguraba iba a combatir.
Si bien en el peronismo de esto saben bastante, mejor no olvidar que “el que traiciona una vez, traiciona siempre”, dice el refrán.
D.R