CON EL TRAQUETEO DEL CARRO LO MELONES SE ACOMODAN SOLOS

CON EL TRAQUETEO DEL CARRO LO MELONES SE ACOMODAN SOLOS
Axel Kicillof ( gentileza)

Mientras  el PJ/K continúa curándose las heridas tras haber perdido las elecciones del año pasado y no encuentra por el momento un conductor que unifique nuevamente al partido de caras a las elecciones del año que viene, el gobernador Axel Kicillof quien no esconde sus ganas de querer ser esa figura, hace malabares entre propios y ajenos con la intención de sumar nuevos apoyos a su casusa y evitar alejamientos por desconfianza o inacción.
Sucede que no son pocos los referentes PJ/K que le piden al gobernador que sea más claro a la hora de pronunciarse respecto a su decisión o no de enfrentar de lleno a La Cámpora, liderada por Máximo Kirchner, quien no da tregua a la hora de criticar  la gestión del gobernador, todo esto con el guiño de Cristina Fernández.
Mientras esto ocurre otro sector del Pj intenta levantar cabeza y sumar peso dentro del partido. Esta corriente está liderada por el intendente Fernando Grey, quien se opuso férreamente al avance de La Cámpora en su distrito y hasta tiene una causa contra Máximo Kirchner por la conducción del PJ provincial que el hijisimo le virló entre gallos y medianoches, y que aún espera resolución judicial. Junto a Grey hay otros dirigentes, algunos incluso formaron parte del gobierno de Alberto Fernández, a quien hoy prácticamente desconocen y otros que provienen del sector sindical.
Dentro de los tres sectores, este último es el que menos poder de fuego tiene, pero  hay que reconocerle su  voluntad de acción para seguir adelante.

Deshojando margaritas

Entre los primeros dirigentes de peso que saltaron el cerco camporista se encuentra Andrés Larroque,  otrora mano derecha del conductor de la toda poderosa agrupación que prometía los pibes para la liberación.
Sucede que no contento con el devenir de la mencionada agrupación y mucho menos con la conducción de Máximo, Larroque decidió partir en busca de nuevos rumbos y conchabos para recalar en el gobierno de Kicillof con rango ministerial, cosa que a todas luces no viene nada mal, si de construir poder se trata.
Junto a Larroque también emigraron algunos dirigentes de menor talla pero siempre dispuestos a dar la nota si con eso se aseguran el puesto tan deseado, como fue el caso de la ex titular del Inadi, Victoria Donda quien tras su alejamiento del gobierno nacional terminó abrevando en la fuente de empleo del gobierno provincial con el cargo de “subsecretaria de Análisis y Seguimiento Político Estratégico”, claro está que ésta no tiene el tan mentado “músculo político” que posee Larroque y  varios intendentes que impulsan al gobernador como capo del PJ/K.
Ahora bien,  el problema que por estos días da vuelta en el despacho de más de un jefe municipal  y dirigente peronista es saber a ciencia cierta si conviene seguir los pasos de Larroque o esperar el devenir de los meses ya que en política quien no maneja los tiempos está perdido.
Mientras revolvía  el cortado que tenía frente suyo, un viejo dirigente peronista que participó en cientos de contiendas y escaramuzas  de este tipo aseguró “el problema que tenemos con Axel, es que por el momento el pibe va y viene. Se presenta como el gran opositor, pero no termina de independizarse de los designios de Cristina, quien tampoco termina de definirse y agranda el quilombo”.
“Además hay que tener en cuenta otras cosas: una que no pesa mucho pero jode es saber qué va a hacer Massa esta vuelta. Viene con nosotros, se va solo o se sube al cometa Haley, se junta con algún político que mida un poco y arma otra alianza electoral para  prometer cosas que después no cumple?” agregó. “La otra cuestión más contundente aunque solucionable, es que Axel no tiene buena llegada con algunos  intendentes del interior de la provincia que le reclaman mayor atención, porque son ellos los que ponen el pecho todos los días”. “De todas formas sabemos que, como dice el dicho,  con el  traqueteo del carro los melones se acomoden solos”,  finalizo el viejo peronista mientras pedía otra ronda de cortados.
Quienes le calientan el agua para el mate al gobernador de la provincia, aseguran en estricto off de récord que: “Axel nos dice que  hay que dar pasos cortos pero firmes. No es momento de grandes enfrentamientos internos ni de cuestiones mesiánicas, el tiempo pondrá las cosas en su lugar y nosotros vamos estar a la altura de las circunstancias” (otra vez los melones y el carro).
 Mientras todo esto ocurre cada uno de los actores de esta serie trata de salvar las papas como puede y no saca el plato de ninguna mesa, no sea cuestión de elegir la equivocada faltando tanto tiempo y ser expulsado del restaurant con los problemas que eso implicaría, verdad? 

D.R