ARRANCÓ EL PLAN " PLATITA II "
Con la intención de retener el poder provincial, un gobierno que se autopercibe “progre” acude a los viejos métodos de la política.
Con la intención de retener labprovincia de Buenos Aires y así convertirse en una fuerte oposición en caso de perder las elecciones provinciales, el gobierno nacional no repara en gastos a la hora de enviar dinero al gobierno de Axel Kicillof. Las partidas enviadas fuera del presupuesto Nacional, superan los u$d 7.500 millones.
Los especialistas afirman que en los cuatro primeros meses del año el gobierno de Kicillof recibió $ 154 mil millones, lo que representa casi el 49% de la masa de dinero que el gobierno de los Fernández envió a las provincias. En contra partida a Santa Fe le tocó el 5%, a CABA el 7,7 y a Córdoba el 3,9%.
Sucede que para UxP es fundamental retener dicho territorio por lo que es fácil ver al gobernador regalando notebooks, biciletas y cuanto elemento haga falta para continuar con la vieja política clientelista, a pesar que se considera un abanderado del progresismo. Nada importa a la hora de intentar retener a la mayor parte de los votantes de dicho espacio que, según los especialistas, se encuentra en buena parte de la provincia y en especial en el conurbano.
No hay que dejar de lado tampoco la concreción de obras públicas que esperaban ser ejecutadas hace 40 años y que por arte de magia comenzaron a hacerse realidad hace pocos meses, a pesar de que en muchos casos furon anunciadas hace más de un año con bombos y platillos hasta por ministro nacionales.
A esto se suma una suerte de “plan platita” pero de mucho menor escala ya que el gobierno sabe que no cuenta con los fondos para seguir emitiendo dinero sin más, sin embargo la emisión monetaria y su consiguiente relato inflacionario siguen a la orden del día punto tal que el IPC de junio ronda el 7% cosa que se festeja como gol de media cancha y que en realidad refleja un fracaso absoluto en materia Económica si se pone la mirada en los guarismo de otros países de la región a los cuales también afectó la guerra, sequía y la pandemia.
Al igual que el gobierno nacional sin nada para mostrar en lo que a pemjoras sustanciales en la calidad de vida de la población, Axel Kicillof se suma de lleno a la campaña del miedo haciendo temerarias declaraciones futuristas respecto a lo que la oposición hará en caso de ganar las elecciones.
Lo que el gobernador de los “más y mejores derechos” no dice es que durante su mandato y el de su partido a nivel nacional los índices de pobreza y marginalidad aumentaron a valores impensados alcanzando al 51% de la población; logrando además lo que ningún otro gobierno logró hasta ahora: que un trabajador registrado sea pobre. Lo mismo ocurre con los niveles de inseguridad en la provincia que dirige a punto tal que -como diriía el propio Axel- "no se pudió" garantizar ni la seguridad del propio ministro de Seguridad, a quien un grupo de colectiveros apaleó sin más.
D.R