La CGT descartó un paro
La central sindical decidió no hacer el encuentro previsto para este lunes y descartó un paro por el atentado a Cristina. Sigue el estado de alerta.
La Confederación General del Trabajo (CGT), que decidió suspender la reunión del consejo directivo prevista para este lunes, en la que se iba a discutir la posibilidad de un paro nacional con movilizaciones en los principales puntos del país, con foco en una manifestación contra la Corte suprema de Justicia. Asimismo, la central obrera ratificó que continúa en estado de alerta ante la situación que atraviesa la Argentina, tras el atentado a Cristina Fernández de Kirchner.
En comunicado que firman los tres secretarios Generales, Héctor Daer, Carlos Acuña y Pablo Moyano, la CGT señaló que la manifestación en Plaza de Mayo y otros puntos del país fue una "respuesta contundente de los trabajadores a la convocatoria efectuada", indicando que "por las razones expuestas en la última reunión corresponde dar por superada la reunión del Consejo Directivo convocada para el día de hoy (por este lunes), seguir la evolución de los acontecimientos y mantener el estado de alerta".
La central obrera insistió en reclamar un cese a la "violencia social y política", al tiempo que exigió "Justicia Independiente para todos los argentinos" y agregó que "el movimiento obrero organizado garantizará, con la fuerza de todos los trabajadores, la plena vigencia de todos los derechos democráticos de nuestro país".
Según las fuentes gremiales, la decisión de suspender el encuentro congeló la posibilidad de profundizar las diferencias en el seno de la CGT. En el encuentro se pensaba debatir sobre qué acciones tomar tras el ataque perpetrado el jueves por la noche contra la vicepresidenta y "en defensa de la democracia y la paz social".
Mientras el sector que lidera uno de los secretarios Generales, Pablo Moyano, impulsaba un paro nacional con movilización hacia la Corte Suprema de Justicia, los espacios representados por los otros dos cotitulares, Héctor Daer y Carlos Acuña sostenian que la manifestación del viernes pasado fue una clara señal de repudio a los hechos acontecidos y que un nuevo cese de actividades solo profundizaría las divisiones en la sociedad.
Después de un intenso debate el viernes por la mañana, que derivó en la marcha a la Plaza de Mayo, los dirigentes cegetistas convocaron a una reunión para este lunes, con la idea de seguir debatiendo los pasos a seguir. Daer había descartado parcialmente la realización de una nueva jornada, mientras que fuentes gremiales indicaron que "el consejo directivo dejó las puertas abiertas para convocar a una huelga nacional con movilización, según la evolución de la situación política".