FRANCIA EN EL OJO DE LA TORMENTA
El estallido social responde al asesinato de un joven de 17 años en Nanterre, al noroeste de París. El presidente Emmanuel Macron convocó para esta semana una reunión en el Ministerio del Interior para tratar de solucionar la crisis que azota al país.
En una primera instancia, la policía francesa denunció un intento de fuga y atropello, pero un video que circula en redes sociales desmiente esta versión. Por su parte, el agente acusado de "gatillo fácil" se encuentra detenido por presunta responsabilidad en el delito de homicidio.
El abogado de la familia de la víctima, Yassine Bouzrou, afirmó que se trata de un hecho "extremadamente grave" y que el video demuestra que Näel fue "abatido a sangre fría sin legítima defensa posible".
La Fiscalía de Nanterre concluyó que "no se cumplieron las condiciones legales" para el uso de armas de fuego en la intervención policial. Además, acusaron al agente de "homicidio voluntario" y decretaron prisión provisional.
El acusado afirma que su accionar fue para "evitar una nueva fuga del vehículo". El policía manifestó que el comportamiento de Naël fue "peligroso".
Según su versión, desenfundó el arma y le apuntó para "evitar que arranque el vehículo", pero el joven no acató las órdenes. El propio Gobierno de Francia criticó el actuar del asesino.
El Gobierno desplegó más de 40.000 policías y gendarmes con el objetivo de "restablecer el orden republicano". La medida solo fomentó el caos y las protestas se tornaron aún más violentas. Videos virales en redes sociales muestran escuelas, ayuntamientos, tribunales, paradas de bus y comisarías prendidas fuego.
Hasta el momento, fueron reportados 24 policías heridos y 40 vehículos incendiados. Además, múltiples protestas se han desatado en distintas ciudades de Francia como Toulouse y Lille.
Un medio local informó que durante los disturbios hubo un intento de fuga de presos en la prisión de Fresnes, ubicada en la Isla de Francia. decenas de encapuchados intentaron acceder por la fuerza al centro penitenciario para liberar a los sentenciados, pero fueron repelidos.
“Intervención inexcusable “
Emmanuel Macron convocó para este jueves una reunión en el Ministerio del Interior para intentar solucionar el estallido social. En la misma línea, manifestó que los ataques contra las instituciones son "injustificables", al mismo tiempo que se solidarizó con la familia de la víctima. Sumó que la intervención policial que terminó con la vida de Näel fue "inexcusable".
La primera ministra francesa, Elizabeth Borne, llamó a la calma y aseguró que "se hará justicia". A su vez Jean-Luc Mélenchon, fundador de La Francia Insumisa (LFI) y político, pidió justicia y criticó al Gobierno.
"Los perros guardianes nos ordenan llamar a la calma. Pedimos justicia, retirar la acción legal contra el pobre Nahel, el joven fallecido, y suspender al policía asesino y a su cómplice que le ordenó disparar", cerró el dirigente.
Las protestas en Bélgica y Suiza
Diversas protestas se desataron en Bruselas (Bélgica) durante el fin de semana en protesta del asesinato de Näel. Detuvieron a 35 personas de las cuales 31 eran menores de edad. Los manifestantes se reunieron cerca de una plaza en la capital Belga e instaron a alterar el orden público.
En Lausana, Suiza, cientos de personas se reunieron en el centro de la ciudad para protestar por la muerte del joven francés. Rompieron escaparates y puertas de diversas tiendas. El punto máximo de tensión fue cuando los manifestantes lanzaron un cóctel molotov a la policía.
El hecho derivó en la detención de seis personas entre 15 y 17 años. Además, capturaron a un suizo de 24 años.