SIGUE LA PELEA ESPERT VS KICILLOF POR EL AUMENTO DE IMPUESTOS
El diputado convocó a una “rebelión fiscal” por los incrementos en patentes y tributos inmobiliarios cosa que representó casi $280.000 millones para la recaudación bonaerense en 2023
La provincia de Buenos Aires aprobó en la Ley Impositiva 2024 aumentos que motivaron la “rebelión fiscal” convocada por el diputado José Luis Espert. Puntualmente, son tres los tributos a los que el nuevo miembro de La Libertad Avanza se refirió: el impuesto inmobiliario urbano y rural, y las patentes.
Estos tres gravámenes representan al 16% de la recaudación bonaerense, tal como informan desde la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA). Es decir, ingresos que en 2023 significaron $277.317 millones de pesos, de acuerdo con los números del Ministerio de Hacienda provincial.
Según muestran las leyes impositivas bonaerenses de este año y del pasado, las escalas para quienes tengan una propiedad radicada en territorio urbano pasaron de ubicarse entre el 40% - 75% a oscilar entre 140% - 200%. Misma modificación se aplicó para el impuesto rural. En tanto patentes, más de la mitad de los que tengan un auto en la provincia deberá pagar facturas con aumentos que parten desde 200% y ascienden hasta 288%.
Desde la gobernación que encabeza Kicillof rechazan la idea de un “impuestazo”. Incluso, una funcionario bonaerense le dijo al diario LA NACION que “no es cierto que se haya hecho esto para aumentar el gasto”. Además, la misma fuente sostuvo que sólo en términos nominales los tributos aumentaron. En un comunicado oficial, la Provincia esgrimió que con una inflación interanual del 276,2%, tal como mostró el informe de febrero elaborado por el Indec, “más del 99% de los propietarios rurales habrán recibido incrementos en el impuesto emitido por debajo de la inflación”. En el caso de las patentes, el argumento es similar: “El aumento promedio anual del impuesto es de 180,4%”. Por lo tanto, lo ubican por debajo del alza de precios. Sin embargo hay que tener en cuenta que en algunos casos se aumentó la base de los mismos por lo que el aumento real que paga el contribuyente fue mayor.
Los tributaristas César Litvin y Diego Fraga coincidieron en que los nuevos números en los impuestos son grandes pero ninguno adhirió a la idea de una “rebelión fiscal”.