PRÉSTAMOS PERSONALES Y TARJETAS EN RETROCESO
Etas operaciones registran una caída de 14% en los últimos 12 meses. Las altas tasas de interés juegan en su contra.
La inflación, las tasas en alza y la crisis económica golpean al crédito bancario para el consumo según se nota en los informes de algunas entidades de comercio que según afirman llevan ya cuatro meses en caída.
Según el Banco central de la República argentina (BCRA) estos préstamos tuvieron una caída de 1,6% mensual (sin estacionalidad y a precios constantes), al tiempo que acumulan una baja de 14,4% en los últimos 12 meses.
De acuerdo con el reporte oficial, las financiaciones instrumentadas con tarjetas de crédito evidenciaron una disminución mensual de 1% sin estacionalidad (s.e) lo que representa un 11,6% interanual, mientras que los préstamos personales se contrajeron 2,5% s.e. y se ubican 19% por debajo del nivel registrado un año atrás.
Costos en alza = menos uso
A fines de marzo, el BCRA decidió aumentar su tasa de referencia, que impacta directamente en el costo de financiamiento bancario. Si bien en aquella oportunidad no hubo una norma específica sobre las tasas de tarjetas de crédito (como sucedió en abril), el incremento definido por la autoridad monetaria derivó en una suba de los costos de utilizar los programas oficiales como “Ahora 12″ cuya tasa pasó de 63,75% a 66,30% nominal anual.
Al respecto, Guillermo Barbero, socio de First Capital Group, dijo que “la suba de tasas activas, que se viene manifestando en los últimos mese aumentar los valores de los intereses incluidos en las cuotas, lo que ha disminuido el capital que se cancela con cada una de ellas”.
Con respecto a los préstamos personales, la tasa promedio relevada por el BCRA pasó de 79,7% en marzo a 81% en abril, aunque los costos reales pueden ser mucho más altos en los bancos, llegando en algunos casos a más del 100% final.
Desde la consultora LCG pusieron el foco en cómo seguirá la dinámica de los créditos para los próximos meses y consideraron que lo más probable es que se mantenga la tendencia contractiva, en un escenario de menor actividad, sobre el que se suma un costo de financiamiento más elevado y restringido.
Los analistas indicaron que a pesar de algunos planes como el AHORA 12, “la aceleración de los precios y una tasa de interés real positiva impactaría en los precios finales de los productos a financiar, por lo que su efecto reactivador estaría acotado en la medida que no se dé una recuperación del poder adquisitivo, algo que posiblemente no ocurra en el corto plazo”.