LA CULPA SIEMPRE ES DEL OTRO…
El gobernador Axel Kicillof se mostró más que preocupado ayer por los altibajos que se registran en la actual temporada de verano y –no sin cierta razón- cargó las tintas respecto a las políticas económicas del actual gobierno.
De esta manera una vez más haciendo uso del capítulo 1º del manual “K” que indica que “cuando pasa algo malo la culpa siempre es del otro”, Kiciloff aseguró que “ se observa el impacto de las políticas económicas del gobierno nacional: estamos en una temporada heterogénea en la que todos los indicadores del turismo popular han empeorado”.
Además el mandamás provincial señaló que “Si bien en algunos destinos se mantiene la afluencia turística con respecto al año pasado, han caído fuertemente la ocupación, los niveles de gastos y la prolongación de las estadías”.
Kicillof afirmó además su que “la respuesta no es con menos, sino con más presencia de un Estado que brinde respuestas ante una situación que se presenta adversa”.
Hasta aquí nada nuevo respecto a los habituales pronunciamientos del mandamás provincial, ya que obviamente no iba a mencionar la desastrosa herencia que dejó el gobierno - a cuyo partido él pertenece - integrado por el trinomio Alberto Fernández, Cristina Fernández y Sergio Massa, cuyas consecuencias aún se notan, por caso el retraso en las tarifas, los combustibles, los alimentos con precios “cuidados” , el valor del transporte “pisado” o un dólar de $350.
La única verdad es la realidad
Según datos oficiales más del 50% de los argentinos es pobre o indigente y los niveles de pobreza saltaron de forma estrepitosa durante el último año de la mano del ex superministro de Economía, Sergio Massa, a quien Axe Kicillof acompañó en cuanto afiche de campaña pudo verse, allá por noviembre del año pasado.
Es más, los niveles de pobreza , indigencia y desigualdad, en el territorio que conduce el reelecto gobernador que ahora se muestra preocupado por la baja en los niveles de turismo, superan esos guarimos.
Tal vez si se ejerciera el sano ejercicio del análisis y la reflexión, se llegaría a la conclusión que –quizá y solo quizá- es previsible que en un país donde los niveles de pobreza alcanzaron el último año a 1 de cada 2 habitantes, el movimiento turístico haya menguado; verdad?
Pero esto no se menciona ya que si algo conocen bien los integrantes de la clase política nacional es la memoria de corto plazo que tiene gran parte de los argentinos, que hace que lo que sucedió hace tres meses caiga en el olvido como si hubieran pasado tres siglos.
Como era de esperar el mandamás provincial tampoco hizo mención alguna al perjuicio que le ocasionará al Estado –en definitiva a todos los argentinos- la decisión de expropiar YPF en momentos en que él mismo integraba el ministerio de Economía, durante la gestión de CFK-, por la cual ahora habrá que pagar más de u$s 16 mil millones, lo que representa más del doble del valor actual de la compañía.
Estado presente?
Otro punto que olvidó mencionar el gobernador y que afecta de lleno a los que menos tienen y lejos están en pensar en salir de vacaciones, está referido a las tomas de terrenos y los problemas que allí se viven, por caso en González Catán, donde según afirman quienes siguen de cerca el caso, se mezcla la corrupción oficial y el narcotráfico al cual el gobierno provincial no le encuentra solución.
A pesar de la habitual muletilla que hace referencia al “Estado presente”, quedó a las claras que esto no sucede o al menos no ocurre en los lugares justamente más vulnerables. De ser así, dónde estuvo el Estado durante la toma y el tiroteo en González Catán?. Cómo es posible que en un partido donde hace más de 30 años gobierna el mismo signo político y 20 el mismo intendente ocurra semejante descalabro ?.
No es intención de estas líneas defender las acciones del gobierno de LLA, ni desconocer cómo algunas medidas afectan de lleno y en primer lugar, a quienes menos tienen y a la otrora clase media en general; pero tampoco se puede olvidar el camino recorrido para llegar a esta situación, ni quiénes fueron los que condujeron los últimos años los destinos del país, así como hacen los capitostes de la CGT que de ser apodados “Los Gordos”, pasaron a ser “Los Osos”, por el largo período de hibernación que mantuvieron durante el gobierno del FdT.
Así las cosas quizá sea verdad la sentencia que reza que “ “los que ostentan el poder son los más hábiles para conseguirlo , pero los menos calificados para ejercerlo”.
D.R