CARRIO ENTRE LA MÍSTICA Y LA CRITICA RESALTÓ LA IMPORTANCIA DE LA COALICIÓN CÍVICA EN JXC

Lejos de solucionarse los fuertes enfrentamientos dentro de JxC crecen con el correr de los días. Como si tuvieran un documento firmado que les asegura que dicha coalición tiene las elecciones ganadas, sus candidatos ensanchan cada vez más la brecha que los separa dejando así huellas que después del 13 de agosto muchos afirman serán difíciles de sortear.
Mientras que el alcalde porteño Horacio Rodríguez Larreta no duda en despegarse de quien fuera su mentor indicando que ese modelo ya fue y que su actual contrincante, Patricia Bullrich, representa lo mismo que lo que él antes apoyaba pero ahora critica, su contrincante no duda de tratarlo de “ventajero”.
En tanto la líder de la Coalición Cívica (C.C) Lilita Carrió no deja de despacharse con afirmaciones místicas que para algunos dirigentes de JxC solo producen más confusión, eso si, dejando bien en claro su nivel de importancia y de sacrificio, como no podía ser de otra manera viniendo de la precandidata al Parlasur.
 “Si nosotros (la Coalición Cívica)no equilibrábamos y yo me asociaba con Mauricio [Macri], se terminaba Juntos por el Cambio (JxC) porque el radicalismo rompía. El sacrificio que nosotros tuvimos que hacer fue poner un factor de equilibrio para que JxC se mantenga unido”, dijo Carrio.
Además la ex diputada  recordó cuando se alió a Mauricio Macri y al radicalismo indicando que “tuve que hace un salto supra-ético en 2015 porque en algunos momentos, alguien tiene que perder para que gane la nación, y yo hice un salto ético quizás impensable, que es hacer una alianza con el hijo de Franco Macri”.
Ya en tono  místico carrió afirmó que “no dormía de noche, no sabía lo que me decía mi conciencia, lo que me decía Dios. Un día en Concepción del Uruguay, en la tumba de Justo José de Urquiza, me di cuenta de que él perdió para que gane la nación; él perdió en el pacto masónico de 1858, cuando él decidió perder para que se incorporara la provincia de Buenos Aires. Ahí decidí que yo iba a perder, esto fue en secreto, nadie supo nada y  partir de ahí, de esa estrategia, empecé a tratar de equilibrar”. Para luego asegurar que a Mauricio Macri lo acompañó “hasta el final” y que si bien  “ya no lo quiero tanto” tiene “un buen diálogo político”.
A la hora de hacer vaticinios la titular de la C.C afirmó que “creo, con certeza indubitable, que el año que viene empieza el peor año para la Argentina, cualquiera sea el gobierno que venga”. “Lo digo con certeza, con datos, con respaldo; lo que está en juego es la clase media argentina