CFK CULPÓ A KICILOFF POR LA DERROTA EN BUENOS AIRES

Utilizando el “artículo 1º del Manual  del Buen Kirchnerista” que reza: “la culpa siempre es del otro”, la ex presidente de la Nación  y actual presidente del Pj nacional, Cristina Fernández de Kirchner, responsabilizó al gobernador Axel  Kicillof por la derrota sufrida en las pasadas elecciones legislativas nacionales en PBA.
Desde su departamento ubicado en la calle San José 1111 de CABA, donde  según sus palabras cumple  una “injusta prisión y proscripción” , tras haber sido encontrada penalmente responsable  de haber defraudado al Estado  en una cifra multimillonaria por la que se  la sentenció a seis años de prisión domiciliaria, CFK  difundió una carta dirigida a la militancia peronista en la que repasó los resultados electorales del 26 de octubre, cuestionó decisiones estratégicas en la provincia de Buenos Aires, denunció persecución judicial contra dirigentes del campo nacional y popular, y convocó a sostener la unidad del peronismo frente al escenario político actual.
A lo largo de todo el documento, la ex presidente jamás realizó una autocrítica profunda  ni asumió responsabilidad alguna por la derrota sufrida  en buena parte del territorio nacional por la fuerza política que conduce.
En el paper dividido en diez puntos, Fernández de Kirchner contextualizó los comicios legislativos y trazó paralelismos históricos con anteriores procesos electorales.
La ex presidenta recordó que, desde 1983, todos los presidentes salvo Fernando de la Rúa y Alberto Fernández ganaron la primera elección parlamentaria posterior a asumir. Sin embargo, aclaró que ese resultado no garantiza continuidad presidencial, al citar como ejemplo la derrota de Mauricio Macri en 2019 pese a haber triunfado en 2017.
CFK  destacó el desempeño electoral de gobernadores peronistas en provincias como La Pampa, La Rioja, Catamarca, Tucumán y Formosa  para luego atribuir  la derrota en la provincia de Buenos Aires a una decisión política que consideró errónea: el desdoblamiento de la elección provincial, cosa con la cual dijo  no estar de acuerdo y haberlo dejado en claro en el mes de abril.
Según su análisis, la amplia diferencia obtenida en las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre generó un efecto similar al de una interna anticipada que facilitó la reorganización del voto opositor. Argumentó que esta situación ya se había dado en otros momentos políticos del país, como en 2003 o en 1989, con altos porcentajes de adhesión a opciones no peronistas pese a contextos de crisis.
En otro tramo, Fernández de Kirchner sostuvo que al histórico antiperonismo se sumó esta vez un clima de temor ante la posibilidad de un agravamiento económico si el oficialismo era derrotado. Mencionó el impacto de la suba del dólar, el riesgo país y declaraciones del expresidente de Estados Unidos Donald Trump, quien condicionó el respaldo financiero norteamericano al resultado electoral argentino.
La ex presidente no consideró que quizá la elección de un candidato fuertemente criticado, un mensaje ubicado en el siglo pasado o los errores cometidos durante el gobierno de Alberto Fernández del cual ella fue presidente, tuvieron  quizá algún peso en la población. Tampoco analizó si más allá de sus comentarios, no existe una parte de la población que decidió apoyar decididamente  al actual gobierno. Imposible.
A nivel nacional, subrayó que la suma de votos del peronismo alcanzó el 35%, frente al 40% obtenido por La Libertad Avanza, en un contexto que describió como caracterizado por el ausentismo y la insatisfacción democrática.

Victimas de la justicia

Uno de los ejes centrales del documento fue la denuncia sobre una supuesta ofensiva judicial destinada a fracturar al peronismo. Enumeró una serie de fallos de la Corte Suprema de Justicia que, según afirmó, favorecieron a dirigentes opositores y perjudicaron a figuras vinculadas al oficialismo. Mencionó entre ellos el sobreseimiento de Mauricio Macri por la causa de espionaje a familiares del ARA San Juan y la confirmación de condenas contra Martín Sabbatella y Guillermo Moreno, además del rechazo de recursos vinculados al intento de asesinato que sufrió en 2022.
En el tramo final, la ex presidenta reiteró la importancia de sostener la unidad del espacio, no como consigna vacía sino como instrumento político que requiere cohesión, estrategia y claridad programática. Finalizó señalando que es necesario tener coraje para enfrentar los desafíos actuales, pero no habló de realizar corrección o cambio alguno. Tampoco mencionó la posibilidad de convocar a los principales actores del Pj a debatir los pasos a seguir para saldar la actual crisis por la que atraviesa  Fuerza Patria.
Tampoc se hizo eco de las críticas recibidas por algunos de sus compañeros partidarios tras el “festejo” en el balcón el domingo pasado, mientras el Pj perdía en más de una decena de provincias y en la estratégica PBA.

Info: M Z - redacción