LOS "GORDOS" DE LA CGT DEFINEN FECHA DEL TERCER PARO GENERAL CONTRA MILEI
El Consejo Directivo de la CGT se reunirá hoy en la sede de la central para definir la fecha exacta y modalidad del tercer paro general que decidió activar en la gestión de Javier Milei. En la previa se discutió la posibilidad de concretar la huelga el 8 de abril, pero luego surgieron versiones acerca de que se realizará el 10 de ese mes con una movilización el día previo.
Todo se definirá este jueves por la tarde cuando concluya el encuentro de los dirigentes que integran la conducción de la entidad de la calle Azopardo.
El ala de la central obrera más opositora al Gobierno fue la que motorizó un planteo para que los jefes sindicales declaren una nueva medida de fuerza, luego de los dos paros realizados el 24 de enero y el 9 de mayo, en los inicios de la gestión libertaria.
De esta forma se cumple el axioma que indica que cuando el que gobierna es el PJ, la CGT emite “duros comunicados”, ahora si el gobierno es de otro signo político el paro está a la orden del día.
Sucede que en muchos líderes sindicales presentan un discurso progresista pero bolsillos de oligarca, lo que les permite mantener un nivel de vida alejado sustancialmente de las bases que dicen representar y de la que están tan alejados que ya no recuerdan siquiera el camino al lugar de trabajo del cual salieron hace décadas y nunca más volvieron a pisar.
La verdad sea dicha. Es cierto que la situación económico-social está muy lejos de ser siquiera aceptable. Un 34,9% de pobreza no es un dato para festejar , como tampoco lo es el precio de la canasta básica familiar, ni las penurias que a diario viven millones de argentinos.
También es cierto que la diferencia de accionar y discurso de la central obrera es tan burda que hasta el menos avezado en cuestiones políticas se da cuenta que a poco más de un año de gobierno de LLA, la CGT convoca un nuevo paro, el tercero, sin hacerse cargo que hace menos de un año la pobreza durante el gobierno que defendían llegaba al 50%, la inflación viajaba en tren bala y las parrillas de asado no echaban humo a pesar del “plan platita”.
Estos son los dirigentes sindicales que desde hace décadas están al frente de los gremios más fuertes del país haciéndose poderosos mientras los trabajadores a los que dicen defender son cada vez menos y viven cada vez peor; dejando en claro entonces que en muchos casos aquellos que ostentan el poder son los más hábiles para conseguirlo, pero los menos calificados para ejercerlo. Ironías de la vida.
D.R